El astro rey brillaba fuerte y las nubes se habían despejado, el frío mañanero de Cusco se dejaba de sentir y los pututus anunciaban el inicio de la ceremonia de la Pachamama.
El ritual de ofrenda a la Pachamama, que se lleva a cabo todos los primeros de junio, y que marca el inicio del mes jubilar de Cusco y de sus fiestas.
En una ceremonia dirigida por tres sacerdotes andinos, se juntaron elementos andinos así como frutos de la costa, sierra y selva del país, a fin de tributarle a la Madre Tierra, a manera de agradecimiento por todo lo que brinda. Música y danza ambientaron el ritual, que llegó a su punto máximo cuando las autoridades locales, y regentes de las principales instituciones de Cusco, fueron llamados a desarrollar un trabajo impecable, no solo en junio, por las Fiestas del Cusco, sino durante todo el año.
Esta es una ocasión bonita, es una remembranza, que nos identifica y nos recuerda de dónde somos, esperamos que el mes de junio sea de paz y cordialidad, y llamamos a todos los turistas nacionales y extranjeros a visitarnos, y ser parte de la magia de la Ciudad Imperial”, señaló, Luis Pantoja, alcalde de Cusco.
En otro momento felicitó la determinación de las organizaciones y sindicatos regionales, que descartaron cualquier tipo de manifestación durante este mes, a fin de propiciar una reactivación económica y turística de amplio espectro en toda la región. Según el calendario de actividades, se vienen una serie de exposiciones, conferencias, conversatorios y demás, que serán matizados con desfiles y corsos con danzas y música típica de Cusco, todo hasta llegar al 24 de junio, día en que se teatraliza el esperado Inti Raymi.
Fuente: Correo.